1. Tómese el tiempo para involucrar a los niños en una conversación seria. Te sorprenderá lo fácil que es conectar su mundo con el tuyo y al mismo tiempo construir una relación de comunicación abierta, conocimiento compartido y valores saludables.
2. No los sermonees. Deje que sus hijos proporcionen la mayor cantidad de información posible. Déjalos hablar. Escuchar. Sea su socio comercial, no su jefe. Permítales desarrollar sus propias ideas de negocios, luego actúe como asesor para ayudarlos; Comprender los importantes problemas reales involucrados en el funcionamiento de un negocio exitoso.
3. Explique qué son los ingresos, los gastos y las ganancias, y luego qué hacer con las ganancias.
4. Comience con un negocio que se ajuste al presupuesto de su hijo. Construya un negocio en torno a algo que le guste hacer al niño; ya sea volar cometas o trabajar en computadoras.
5. La vida puede ser impredecible. Dígales que planeen para lo inesperado.
6. Deje que sus hijos cometan errores. Deben descubrir que a veces se enseña de esa manera.
7. Dele dinero de bolsillo a sus hijos. De esta manera, comienzan a aprender el valor del dinero. Ayúdelos a reservar dinero de bolsillo para ahorrar, dar e invertir, pero también para divertirse.
8. Fomentar una política de dar a otros u organizaciones que necesitan financiación. Nuestro país necesita gente que se cuide unos a otros.
9. Hable sobre los costos de la casa, las compras y las razones para elegir productos.
10. Ayude a sus hijos a establecer metas individuales alcanzables.